COMERCIO MERCOSUR – UE
REANUDACIÓN DE NEGOCIACIONES vs. DIFICULTADES EN EL INTERCAMBIO

Documento Analítico

A la par de haberse reanudado recientemente las negociaciones del Mercosur con el Bloque de la Unión Europea en Buenos Aires, para lograr un Acuerdo de Asociación, la prensa internacional abundó en el mundo sobre los reclamos registrados en Luxemburgo por una docena de países europeos que expresaron su rechazo a las restricciones impuestas a las importaciones de alimentos por el Gobierno Argentino. El Comisario Europeo Agrícola, Dacian Ciolos de Rumania, especificó que las trabas se estaban registrando en casi todos los productos agrícolas que la UE exporta a nuestro país, destacando la ilegalidad de dichas medidas.

El Consejo de Agricultura de la UE destacó que de continuar aplicando dichas medidas la Argentina, se complicarían seriamente las negociaciones con el Mercosur que recién se reinician. La gravedad de la situación quedó demostrada en un intenso debate interno en la Comisión Europea que versó sobre si la UE debía o no participar en la reiniciación de las negociaciones después de seis años de inactividad. No obstante, el Presidente de la Comisión Europea José Manuel Durao Barrroso de Portugal, resolvió que el Bloque participaría de todos modos de las reuniones iniciadas en Buenos Aires. Las críticas más enérgicas provinieron de Grecia (duraznos enlatados), de Dinamarca (productos lácteos, por ahora), pero las mismas fueron respaldadas por Francia, Italia, Alemania, Irlanda, Austria, Polonia, Bulgaria, Bélgica, Lituania, Rumania y Chipre.

Precisamente esos países lideran la oposición a un Acuerdo de Libre Comercio del Mercosur con la UE por afectar sus intereses nacionales. La figura de negación de trabas que intenta sostener la Argentina aduciendo la inexistencia de bloqueos al comercio, pero reconociendo que el gobierno nacional persigue la preservación de los productos del país, se extiende a una gama mucho más amplia de productos que no pueden entrar tales como quesos, arroz, pastas y fiambres.

Las proyecciones de los procedimientos argentinos y las reacciones europeas se están caracterizando por una inestabilidad comercial en la política de ingreso de productos por una parte, que ciertamente conllevan carácter de proteccionismo, lo cual es ejercido por todos los países del mundo de una manera u otra. Al mismo tiempo, el sector europeo enfatiza sus motivos de queja como estrategia para limitar el posible avance en un Acuerdo de Libre Comercio con países que imponen estas restricciones comerciales de manera no formal, como el nuestro. Además ello les sirve como una base para posicionar niveles de negociación más acordes con el ala dura de la UE.

El contenido de esta realidad proyectará las definiciones a las que se pudieren arribar, de continuarse las negociaciones, en esta primera Ronda reiniciada, que sería lamentable y muy negativo si resultaran improductivas. Lo importante en el cuadro reside indiscutiblemente en el mantenimiento de la disciplina que los países deben observar para preservar la jerarquía y estabilidad de sus intercambios comerciales. En ello la regla de oro marca, “continuidad y transparencia”. Consecuentemente, la Argentina debería diseñar procedimientos que protejan la producción nacional sin erosionar las modalidades internacionales propias del intercambio comercial, pues las relaciones entre ambos Bloques así lo demandan.

Fuentes: La Nación – Reuters
Dr. ROBERTO A. IBARGUREN - Inv. Asoc.
Grad. AGUSTINA JUÁREZ
Salta, Miércoles 30 de Junio 2010
www.ucasal.net/iaei
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